domingo, 22 de marzo de 2015

Chepito

Salió del trabajo con unas ganas locas de volver a casa,era viernes. Había mucha gente por la calle a pesar del mal tiempo, tal vez por la fecha. Si, por la fecha, tenemos una manera un tanto autómata de funcionar en el vestuario llegada la primavera.Lo mismo sucede con el otoño pero eso es otro cantar que ahora no viene a cuento. Decía que el automatismo es el que hace posible que aunque haga un frío polar vayamos vestidos de primavera y salgamos a tomar la calle. Bien, a ver si no me pierdo, el caso es que a pesar de la animación existente en las calles y comercios prefirió esperar el autobús por el frío que hacía Estaba en la parada, también bastante concurrida, cuando de repente empieza a sonar la batería de Chepito Areas, inconfundible, ritmo endiablado.Era "Soul sacrifice" de Santana, concretamente la primera que tocaron en el festival de Woodstock. Eso engancha mucho, te lleva, se te mueve el cuerpo solo. La gente le miraba, o eso le parecía, tal vez el pañuelo resultara llamativo, o los playeros de vivos colores, o el que llevara los cascos puestos y le aislaran y protegieran del mundo, de los ruidos, de las sandeces que se pueden oír por ahi y de tantas cosas. El caso es que cada vez tenía más claro que unas cuantas personas lo miraban, mientras el tema de Santana avanzaba hacia el éxtasis. Porqué no miran para otro lado?, se preguntaba,y, al darse media vuelta hacia la acera , tropezó con un escaparate en el que estaba colocado un gran espejo. y se vio...cierto que el pañuelo era un poco llamativo, cierto que los playeros ,,,resultaban también atractivos por su colorido, pero había algo más , en lo que no había caído,, que era seguramente la verdadera razón por la que la gente le miraba. Estaba moviendo las piernas y siguiendo el ritmo de Soul sacrifice casi como un poseso. No había caído en la cuenta y había dejado que el ritmo le poseyera en plena calle y en medio de la gente. Realmente resultaba llamativo, lo suyo habría sido, para su edad y condición: una mezcla de cara circunspecta y cansancio, todo junto. Le vino rápidamente a la memoria la frase con la que Jorge Bucay termina uno de sus cuentos:"No olvides que el sordo cree que los que bailan están locos", esbozó entonces una sonrisa y decidió entregarse definitivamente al ritmo subiendo al autobús/( que en todo esto ya había llegado a la parada)de un saltito, pagó y enfiló con un cruce de pies hacia la parte trasera

sábado, 21 de marzo de 2015

EL GRUPO

Era temprano, muy temprano para una pequeña capital de provincia. La mayoría del comercio aún estaba cerrado, apenas los bancos y las oficinas se habían incorporado ya a la rutina laboral de un día más. Él había quedado temprano sin caer en la cuenta de esto, pero, como siempre, su carácter claramente positivo dio el parabién sin rechistar lo más mínimo. El caso es que, habiendo terminado muy pronto, ´decidió que era una buena oportunidad para visitar algún lugar de los que últimamente tenía un tanto relegados. Se acercó hasta el último refugio-fortaleza descubierto con el ánimo de tomar un rico café y, si terciaba, inspirarse con alguna historia Al poco de sentarse en su puesto entró una pequeña marea humana´, compuesta por unos 15 a 20 personas que rompieron el silencio con sus voces un tanto desafinadas pero alegres, muy alegres. Se trataba de un grupo de chicos y chicas de algún centro específico ,había entre ellos varios síndrome de Down , como siempre tan alegres, positivos, y cariñosos. Se sentaron en 2 mesas grandes y las cuidadoras se repartieron en ambas. Todo era alegría, jolgorio y según el grupo iba animándose más, el sol, como aprobando y festejando toda esa alegría se decidió por fin a brillar con toda su fuerza para terminar de iluminar bien el día. Él se sintió cómodo y ya que su mesa estaba situada entre las dos del grupo, se integró, en silencio, pero se integró hasta el corazón. La alegría acabó reinando y con ella se fueron los malos rollos, el desánimo, la decepción, el dolor y otras tantas sensaciones negativas. De su experiencia personal sabía que el contacto franco, abierto, fluido y cariñoso con estos "niños mayores" siempre acababa dejando un poso de reconfortante serenidad. Tal vez su vivencia traspasara ciertos límites y, de alguna manera, se sintió como uno más de ellos en ciertos períodos de su vida.Enfrascado en viejos recuerdos se encontraba de pleno cuando el grupo decidió marcharse y continuar camino en esa bonita mañana de excursión Había dormido poco esa noche y tenía algo de sueño, tal vez también sea un buen momento para retirarse a casa, pensó. La mitad de la mañana había resultado muy interesante, a ver que deparaba el resto del día se preguntó mientras abría la puerta y enfilaba hacia su casa

domingo, 8 de marzo de 2015

UN DÍA CON SOL

Eran poco más de las 10 de la mañana de un sábado y se encontraba en la cafetería de una estación invernal. La cafetería era atendida por dos chicas jóvenes que parecían calcadas ambas,sólo que una en rubio y la otra en moreno, por lo demás misma altura, constitución física e incluso ropa. Gente, a montones, el día era muy propicio y había mono de esquiar por parte de los aficionados. El caso es que él estaba allí , como un pulpo en un garaje, pero allí estaba. La noche anterior le había llamado su adolescente hijo para preguntarle si podía hoy llevarlo a esquiar,petición que fue atendida por él de buen grado.nn Eso sí, lo que no estaba dispuesto era a pasar largas horas en la cafetería por lo que dispuso de información para hacerse alguna excursión a algún sitio cercano. También se propuso escribir su crónica vital del día de hoy, en presente continuo, sin adelantarse a ningún acontecimiento ni hacerlo a cosa pasada. Tras el café, para entonarse, consultó la información a través de internet y se dispuso a iniciar su aventura particular. traspasó rápidamente el límite de Asturias con León y se adentró, entre un hermoso y nevado paisaje, en en el noreste de la provincia de León. Montañoso y con dialecto propio con gran paralelismo con el asturiano, los nativos de estas tierras no se sienten castellanos, sino leoneses.Llegó a Puebla de Lillo, población que tiene carta fundacional del año 1000dc, pero prefirió no detenerse y poder llegar hasta el embalse del Porma. Cuando empezó a asomar en las curvas el embalse y el reflejo del cielo y las montañas en su agua, buscó rápidamente un lugar donde parar y contemplar con detenimiento semejante regalo para los ojos. Lo encontró y bajó con el Iphone dispuesto a fotografiar aquello pero no pudo evitar antes tener un gran estremecimiento. Por un momento se preguntó -Tendrá sentido que me pase la vida viajando por todo el mundo y a veces tan lejos para encontrarme a mi mismo cuando aquí , al lado de casa tengo todo lo necesario? A continuación vino una sensación muy familiar para él, la sentirse una molécula, algo tremendamente pequeño ante aquella grandiosidad,y , al mismo tiempo sentirse parte del todo, sentirse incluso el todo. Ya faltaba poco para la hora en que habíaacias a m quedado con su hijo para comer algo por lo que decidió dar la vuelta hacia la estación Invernal, pero al llegar no sentía ningún apetito, además del follón que había en la cafetería. Estuvo contandole su periplo sólo en lo referente al paisaje, no tiene confianza con su hijo como para contarle que está intentando encontrarse a si mismo( decididamente con su hijo es muy vulnerable ya que siente culpable y un mal padre, lo que lo hace muy sensible a cualquier crítica que el chaval le haga, otra cosa para arreglar). En fin, "el buscador este, de cartonpiedra, terminó, gracias a mi, su crónica de sábado distinto,y, tras quedar por segunda vez en lo que iba de mañana, se preparó para el viaje de "vuelta" a la cotidianeidad.

El mal visto

Era un verdadero capullo, así como suena, un capullo.
Hacía tiempo que se comportaba de manera compulsiva y, molesta para los que convivían con él
Su actitud era juzgada como claramente obsesiva, además su tensión interior era cada vez mayor y casi llegaba al límite peligroso.
Estaba claro, no podía continuar así por más tiempo .
Estaba decidido a sacar provecho de las malas experiencias  vividas últimamente y aprender de ellas. Así se lo había propuesto y así sería( tenía fama de ser muy terco y de ir siempre por el libro).
Los que le conocían bien afirmaban que el mayor cambio que había dado era el haberse vuelto un auténtico bocazas, de boca afilada e insaciable, razón por la que muchos habían decidido alejarse de él.
Y así continuaron las cosas, hasta que una mañana, el capullo se esfumó entre la niebla del amanecer, desapareció para siempre, dejando en su lugar una mariposa multicolor de grandes y hermosas alas